El 19 de marzo de 1997, el Atlético de Madrid disputaba su último partido de Copa de Europa. Para algunos el penúltimo, porque ya ha jugado uno, ante el Schalke 04, hace dos semanas. Una opinión que no comparte el ‘Kun’ Agüero, la gran esperanza rojiblanca para remontar el 1-0 a favor de los alemanes, que piensa que el Atleti aún no es “oficialmente” equipo de Champions. Tranquilos, porque el ‘crack’ rojiblanco está seguro de que el jueves empieza una nueva era junto al Manzanares.
4.179 días, 597 semanas, 100.296 horas y 6.017.760 minutos después de perder contra el Ajax el Atlético debe remontar un 1-0 para acceder a la fase de grupos de la Liga de Campeones 2008/09. No parece gran cosa, pero hay dos evidencias que no conviene olvidar: que es un resultado muy puñetero (un gol del contrario obliga al local a hacer tres) y que enfrente está un equipo alemán. No es el temido Bayern, el viejo fantasma del inconsciente rojiblanco, pero el año pasado fue tercero en la Bundesliga y esta temporada ha empezado bien su liga, con un claro triunfo en la primera jornada (3-0 ante el Hannover 96) y un empate en casa del subcampeón, el Werder Bremen.
El Atleti recupera al ‘Kun’, su gran estrella, el jugador en el que todos confían para dar el salto de calidad que vuelva a colocar a los madrileños entre los más grandes de España y de Europa. Y Agüero lo sabe, aunque, a su llegada a Madrid tras conquistar el oro olímpico (él solito se zampó a Brasil en semifinales) quisiera quitarse presión. Lógico, porque los caminos de este Atlético al gol son muchos: Forlán, Maxi, Simao… Hasta los dos nuevos centrales, Heitinga y Ujfalusi, prometen peligro a balón parado.
Prohibidos los despistes
La asignatura pendiente del Atlético sigue siendo la defensa. El Rayo, un ‘segunda’ de nuevo cuño, y el Sporting, recién llegado a Primera, la dejaron en evidencia en sendos amistosos. Precisamente la zaga –al margen de la inclusión de Agüero en el lugar de Sinama– registrará la principal novedad con respecto al partido del Veltins Arena, ya que el sancionado Antonio López deberá dejar su lugar a Mariano Pernía.
Fred Rutten, técnico del Schalke, tiene más problemas. Dos bajas seguras, las del meta titular Manuel Neuer y el medio Orlando Engelaar, y las dudas de Ivan Rakitic (con gripe) y, sobre todo, la del delantero peruano Jefferson Farfán, que se dañó un hombro en la ida, y cuyo concurso permanecerá en el aire hasta el último momento. El lateral Rafinha, recién llegado, como el ‘Kun’, de los Juegos, será de la partida.
Una gran novedad y un cambio de dibujo
La gran novedad en el conjunto rojiblanco es quizás la más sorprendente. Se trata de Maniche, que volverá al equipo en el centro del campo. Su relación con Aguirre ha mejorado y el Vasco tirará de él para tratar de dar más mordiente y más capacidad ofensiva a la escuadra rojiblanca. El perjudicado en este caso será Assunçao, que era un fijo hasta ahora y dejará su lugar en el campo a Nuno.
La inclusión del futbolista luso en el once puede suponer además un cambio en el sistema, ya que el técnico azteca podría recurrir al dibujo de la pasada campaña con un doble pivote formado por Raúl García y Maniche en lugar del 4-1-3-2 con el que ha trabajado a lo largo de toda la pretemporada.
El Calderón no fallará
Dejamos para el final un factor que puede (y hasta debe) ser decisivo: el Vicente Calderón. La hinchada del Atlético se sabe ante una ocasión histórica y empujará a los suyos, convencida de que la máxima competición continental es su destino natural. Hace once años, el Atleti jugó su última Champions presumiendo de doble condición de campeón de Liga y Copa. Mucho han tenido que penar los hinchas rojiblancos para verse a tan sólo un paso de la meta, el ansiado regreso a la Copa de Europa, ‘Eldorado’ rojiblanco en estos últimos años. Por eso, si hay algo seguro, es que ellos no fallarán. Si el equipo está a su altura, el sueño colchonero se hará realidad
Fuente:Marca