El centrocampista del Chelsea Frank Lampard rechazó las críticas que está recibiendo su equipo tras los incidentes ocurridos después del partido frente al Barcelona, de las semifinales, ida, de la Liga de Campeones, cuando varios de sus compañeros increparon al árbitro y le culparon por no haber pitado al menos tres penaltis.
"No sé qué espera la gente. Cuando tú tienes a once hombres peleando por conseguir llegar a la final y al menos en tres ocasiones no te pitan penalti a tu favor, no puedes esperar que estos hombres se marchen tranquilamente", aseguró.
Lampard optó también por no condenar la actuación de su compañero de equipo Didier Drogba, quien saltó al terreno de juego al acabar el encuentro y se dirigió enfurecido al árbitro, una reacción que dijo "poder entender" porque el marfileño es "un hombre visceral".
Drogba saltó al campo después de que el árbitro pitara el final del partido para recriminar de forma airada al colegiado su actuación, tras lo que se dirigió a una cámara de televisión y dijo: "esto es una puta vergüenza".
"No hubo nada violento, fue sólo el enfado provocado porque habíamos trabajado muy duro para llegar hasta allí", justificó el internacional inglés.
En su opinión, Drogba "es el tipo de jugador con el que quieres jugar y creo que la gente puede identificarse con eso", a lo que añadió que los aficionados "blues" que presenciaron el encuentro en el estadio "estaban frustrados" al final de los noventa minutos.
La actuación arbitral disgustó sobremanera al Chelsea y sus aficionados, entre quienes ha habido algunos que han amenazado de muerte al colegiado noruego Tom Henning Ovebro.
"No es a mí a quien le toca decir si hay una conspiración arbitral", comentó acerca de los rumores que se han extendido por todo el Reino Unido que apuntan a que la actuación del árbitro tenía como objetivo evitar una final de la ''Champions'' entre dos equipos ingleses.
- Spoiler:
AS