El viaje de Vieri a Estados Unidos, que hoy adelanta en su página web el diario deportivo italiano "La Gazzetta dello Sport", llega después de que el pasado 31 de marzo el delantero retirara todas sus pertenencias de la sede del Atalanta, de la Primera división, y abandonara el equipo antes del final de la temporada.
"El jugador, que hace poco ha rescindido su contrato con el Atalanta, ha pedido ayuda a su amigo David Beckham, que le ha facilitado los contactos con el equipo estadounidense", dice "La Gazzetta dello Sport".
"Vieri ya ha partido hacia Estados Unidos en compañía de Melissa Satta, la chica del mundo del espectáculo con la que tiene una historia de amor que, entre altos y bajos, sigue adelante desde hace casi tres años", prosigue.
El delantero, quien nunca terminó de encajar con la afición del Atalanta desde que firmara su contrato el pasado verano, se llevó el pasado 31 de marzo los objetos personales del club y no participó en la habitual sesión de entrenamiento del equipo.
Esta decisión llega después de que Vieri, quien cumplirá 36 años en julio, escuchara silbidos por parte de la afición del Atalanta durante el amistoso jugado el 28 de marzo contra el Bellinzona suizo y que perdieron los italianos, por 1-0.
Los silbidos fueron una muestra más del poco cariño que su ya ex afición le ha demostrado a Vieri en todo este tiempo, sobre todo después de que el delantero prefiriera jugar con el Fiorentina hace dos años, en vez de con el Atalanta, club en el que terminó el pasado verano tras una mala experiencia en el equipo florentino.
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