Rafa Nadal, que se estrenará ante el belga Christophe Rochus en el Abierto de Australia, ha asegurado que para él "ser el número uno no cambia nada" y que no siente una presión añadida.
"Era muy feliz cuando era el número dos y soy muy feliz, seguro, de ser el número uno. Si me da algo es más calma que presión", dijo el tenista balear, quien resaltó que "cada año la temporada empieza de cero para todos. La presión es la misma".
En su opinión será un torneo muy abierto, con opciones para todos. "Hay 128 jugadores y todos, desde la primera ronda, van a ser difíciles para todos", señaló Nadal quien admitió, no obstante, que "hay un grupo que es más favorito que el resto, pero más de tres pueden ganar el torneo".
Murray, uno de los favoritos
El jugador español consideró que, si mantiene su estado de forma el británico Andy Murray tiene grandes posibilidades de conseguir su primer título de Grand Slam.
"Está jugando muy bien, con confianza. Cuando uno gana en Cincinnati, en Madrid, en Doha tras jugar contra (Roger) Federer y Roddick, está preparado para ganar un Grand Slam. Si tú ganas a los mejores en los torneos estás a punto", explicó.
No obstante, Nadal, que podría encontrarse con Murray en su camino hacia la final, ahora está centrado en su debut contra Christophe Rochus, al que nunca se ha enfrentado.
"Yo conozco a su hermano Oliver, pero también he visto a Christophe jugar muchas veces. Como su hermano es un jugador de talento, completo y, si quiero ganar, tengo que imponer un fuerte ritmo", indicó.
Fuente:Marca.com