La Esther Williams del deporte español se convirtó en la reina de la alfombra roja anoche. Cuando se abrió la puerta del decimoprimer coche que llevaba a los deportistas hasta el Palacio de Exposiciones y Congresos de Madrid, surgió la estilizada figura de Gemma Mengual, elegantemente vestida de negro y acompañada por su entrenadora, Anna Tarrés.
Se deslizó por encima de la alfombra como una estrella de Hollywood y eclipsó a todos los deportistas con su belleza y simpatía. Escoltada por Iker Casillas y a escasos 100 metros del Santiago Bernábeu, el templo galáctico por excelencia, Mengual se destapó como la estrella más dorada del firmamento del deporte español (43 medallas en el zurrón). La Sirena estaba radiante: "Quiero agradecer a los que me han votado y al Diario AS este galardón. Es un premio significativo para mí y para todo el equipo porque es fruto del trabajo de todas mis compañeras. Este año ha sido importante para nosotras". Acto seguido salió la selección de sincronizada a respaldar a Mengual.
Este fin de semana se enfrentarán en el Trofeo Mundial FINA de Madrid a rusas, canadienses y japonesas "en una competición especial porque se puntúa lo artístico. Y además podremos mostrar el bañador de luces que no nos permitieron llevar en los Juegos Olímpicos de Pekín".
Y como colofón a este año el próximo día 8 de diciembre protagonizará el anuncio navideño por antonomasia: ella y sus chicas de la sincronizada se convertirán en las burbujas de Freixenet. Acaba un año dulce para nuestra sirena.
Fuente:Diario As.com