Vallecas vivió un festival de goles con lío arbitral

Un gol cada seis minutos y medio. Éste fue el promedio de celebración de tantos al que salieron Rayo y Hércules en la segunda parte del partido que les enfrentó en el estadio Teresa Rivero. Increíble, pero cierto: siete goles en sólo una mitad.

Ese dato es suficientemente significativo como para comprender lo que sucedió en Vallecas: un encuentro con buen fútbol que se convirtió en una montaña rusa por las alternativas en el resultado. El equipo vallecano supo remontar un 0-2, vio cómo el alicantino tuvo de nuevo el choque ganado cuando a falta de tres minutos para el final se puso con un 3-4, y en el que Coke estableció la igualada en el tiempo de prolongación.

Lunar. No se puede pedir más. Bueno sí, que el arbitraje hubiese acompañado al buen fútbol que hubo sobre el terreno de juego, porque la labor de Piñeiro Crespo merecería un comentario muy extenso. En pinceladas, se le puede recriminar el penalti light de Cuadrado a Tiago que supuso el 0-2, el claro que se tragó sobre Peña, las dudas que mostró en el 3-3 (lo concedió, vio que su auxiliar señalaba fuera de juego y lo anuló, para volver a darlo por válido), la acción previa al cuarto tanto del Hércules, en el que Rubén Castro recibió un golpe por detrás cuando tenía el balón controlado en el área del equipo blanquiazul, y que Farinós (se hartó de hacer faltas cuando ya tenía una tarjeta amarilla) terminase el encuentro.

La diferencia entre Hércules y Rayo, ayer, fue la efectividad. El cuadro alicantino acertó en las cuatro ocasiones que tuvo, mientras que el madrileño asistió, sin desesperarse, a la serie de buenas intervenciones de Calatayud. Piti (se notó su entrada al campo), Susaeta, Rubén Castro y Aganzo puedan dar fe de ello.
El detalle: Piñeiro pidió protección

Piñeiro Crespo pidió que la Policía protegiera su coche y ésta puso dos vehículos junto al del árbitro asturiano. Lógico después de la que había liado, pensarán algunos. Lo curioso es que la solicitud la realizó antes del partido, nada más llegar al estadio. Tal vez es que intuía lo que iba a suceder.

Spoiler:

Sin duda un partido marcado por el árbitro y la gran cantidad de goles que se marcaron, pero hace poco hubo un partido que quedó 5-5.