Nivaldo contesta a LLorente: Mi conciencia esta tranquila.

El central brasileño del Real Valladolid eludió la polémica con el delantero del Athletic Club Fernando Llorente y aseguró tener "la conciencia limpia" porque el encontronazo fue un lance fortuito. Nivaldo quiso dejar clara su versión sobre los hechos en la sala de prensa de Zorrilla, respondiendo a los reproches que lanzó Llorente sobre la falta de interés del brasileño por su estado. El defensa blanquivioleta recordó que habló con el jefe de los servicios médicos del Athletic (Josean Lekue) nada más finalizar el encuentro, y con los galenos de su club.

"Me dijo que no me preocupara, que estaba bien. Le insistí en que le pidiera disculpas y en que no había sido queriendo", recordó el brasileño, que aseguró que también intentó localizar el martes por la mañana a Llorente, pero no fue posible, aunque finalmente se cruzaron mensajes cortos (sms) para zanjar el tema. El jugador del Real Valladolid aseguró que fue un lance fortuito del juego. "Fue una jugada en la que quise disputar el balón y él llegó antes que yo. Estoy tranquilo, tengo la conciencia tranquila, no quise hacerle daño. Yo también estaba dolorido pero sí pude seguir jugando", señaló Nivaldo, quien lamentó que Llorente tenga esa opinión negativa sobre él. "Cada uno tiene una manera de pensar. Pero ya está. Ya pasó", zanjó.

El zaguero eludió la polémica en una rueda de prensa en la que hubo numerosas preguntas sobre la famosa jugada. Y también sobre otra en la que se vio involucrado contra Osasuna. Una en la que Nivaldo cabeceó la pelota y Pandiani, al querer peinar el balón también, llegó tarde y golpeó con su nuca al central blanquivioleta. La peor parte se la llevó el uruguayo, pero el que contactó el balón con su cabeza fue Nivaldo. El futbolista recordó que sólo había sido expulsado una vez en toda su carrera antes de llegar a España, cuando militaba en Os Belenenses y por perder tiempo. Por eso tiene claro que no es un jugador conflictivo. "No estoy acostumbrado a las polémicas", concluyó.