A las 19:30 está convocada en la puerta 0 del Calderón una nueva manifestación contra los propietarios. Aunque en los foros de la oposición, los aficionados asumen que la hora en día laborable reducirá la asistencia, el hecho es que el enfado permanece y no conviene minimizarse. Conviene solucionarse. Y el único principio posible hacia la paz es que el Atleti gane luego al Almería y comience a ver luz al final del túnel. Si no, la protesta del final dejará en nada la del principio.
Con el objetivo de convertir la hoguera en incendio, llega uno de los grandes villanos atléticos: Hugo Sánchez. Sin Negredo, el mexicano ha apostado por la garra para suplir una alarmante falta de gol. Tiene los mimbres (la potencia de Uche, la habilidad de Piatti y la velocidad de Crusat), pero le falta la puntería. Aún así, ha rentabilizado su único gol para llevar tres puntos más que su lujoso y aturdido rival.
Entre disgusto y disgusto, Abel al menos se ha llevado la alegría de que Agüero, de largo su mejor futbolista mientras Forlán se pone a punto, podrá jugar pese a su sobrecarga muscular. Simao, también con molestias, entró en la convocatoria, pero no forzará pensando el Valencia-Atleti del sábado.
Las dudas. Aquí comienza el rompecabezas de Abel, que tiene que elegir entre Sinama, al que la grada pita; Cléber, del que la grada se burla, y Reyes, al que la grada aborrece. Curiosamente, en una especie de que sea lo que Dios quiera, el utrerano tiene muchas papeletas para ser el elegido. Lo bueno es que la indiferencia está descartada como resultado final del experimento.
El comodín es Jurado, al que nadie discute como indispensable en un Atleti tan escaso de imaginación, pero no termina de encontrar su sitio ideal una vez que el inamovible dúo Forlán-Kun imposibilita que juegue de mediapunta. En la banda le alejan del balón y en el doble pivote el equipo se parte como se vio en el Camp Nou. Pero el Almería no es el Barça y Abel volverá a probarlo.
Y, por si no había tensión suficiente, arbitra Iturralde, al que le motiva más un buen lío que una fiesta en la mansión Playboy. La función de hoy en el Calderón viene completita.
Roberto debuta en el Calderón tras la dolorosa manita del Barça
La mala actuación de Roberto en el Camp Nou (5-2) no ayudó a cerrar la herida abierta por la convocatoria de Asenjo para el Mundial Sub-20. La insensible decisión de la FEF de no dejar al portero titular del Atlético jugar el sábado en Barcelona y, luego, llevarle el domingo al Bernabéu a ver el Real Madrid-Xerez han provocado una indignación en el Atlético que se verá aumentada cuando el liberado Bojan juegue con el Barça antes del regreso de Asenjo. Con este panorama, Roberto debuta en el Calderón sabiendo que otra noche aciaga marcaría su futuro.
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