La calidad individual de jugadores como Fran Vázquez, Pete Mickeal y Roger Grimau fueron la diferencia que permitió al Regal Barcelona imponerse con comodidad del Bàsquet Manresa (52-75) en el primer partido de pretemporada de los dos equipos catalanes.
Era la primera toma de contacto con el juego, para probar lo trabajado en los primeros entrenamientos y empezar a coger rodaje, por lo que la amplia diferencia en el marcador final (23 puntos), no quedó más que en la anécdota.
Eso sí, en todo momento el Barça fue más resolutivo y estuvo más acertado en el tiro, lo que sumado a su poder en el juego interior no dejó duda sobre cual de los dos conjuntos se llevaría el partido.
Mandando desde el inicio
El choque arrancó con un 0-6 a favor de los azulgranas, mientras que el Manresa, que ha hecho una gran renovación de su plantilla, pasaba más apuros para anotar. Los hombres de Xavi Pascual no tuvieron excesivos problemas para tomar ventaja en el marcador desde el inicio (7-16, min.8 ). El Barça era claramente superior. Aún así el equipo de Jaume Ponsarnau se mantuvo cerca intentando evitar la escapada. Así se pudo ver el poder ofensivo de Ahmad Nivins y las cualidades en la lucha bajo el aro de Brian Cusworth, que acercó a los del Bages a solo cuatro puntos (22-26, min.15).
Pero cuando el Manresa soñaba con dar la vuelta al encuentro, el Barça consiguió un parcial de 3-13, en especial gracias a los puntos de Vázquez (el mejor con 14 puntos y 9 rebotes) y de Jordi Trias (25-39, min.17). Un triple de Roger Grimau sobre la bocina puso el punto y final antes del descanso (30-46, min.20) y otra máxima diferencia para el Barça.
A la vuelta, los azulgranas incrementaron la ventaja fácilmente hasta los 23 puntos gracias a dos triples consecutivos de Basile y a un tiro libre anotado por Ndong (34-57, min.26). Aún así, este fue el mejor cuarto de los manresanos, que mejoraron su ataque.
Grimau encadenó seis puntos consecutivos, que redujeron mínimamente la diferencia, que al final del cuarto era de 18 puntos (43-61, min.30). En el último cuarto, un parcial de 0-8 a favor del Barça sentenció el partido para los de Xavi Pascual, que llegaron a cobrar una máxima diferencia de 26 puntos (43-69, min.34).
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