Ricky Rubio lo fía todo a un traspaso para ir a la NBA

Ricky Rubio tiene claro que antes de ir a Minnesota se quedará en Europa. Pero David Kahn, jefe de operaciones de los Timberwolves, le responde que no tiene prisa: "Si hay algún equipo que pueda esperar, ese somos nosotros". Parece una estrategia clara de negociación, máxime cuando los Knicks están volcados intentando hacerse con los derechos de el base de El Masnou. Los neoyorquinos andan dispuestos a ofrecer a cualquier jugador del equipo a excepción de David Lee en un hipotético traspaso.

Sin embargo, los Knicks no son los únicos interesados en Ricky, también están los Houston Rockets de Rick Adelman, que tras el Draft se hicieron con los derechos de Sergio Llull, que de momento seguirá en el Madrid dos campañas más ("Llull es una gran adquisición, tiene talento", dice Daryl Morey, mánager general de los Rockets).

Mientras se confirma o no el intercambio Ricky Rubio, el jugador tiene varias cosas claras. La primera es que quiere jugar en la NBA a toda costa y, a día de hoy, cualquier otra cosa no le interesa. La segunda, que, si Minnesota no le manda a otra franquicia, difícilmente podría dar el salto a la Liga norteamericana. En Nueva York, con los contratos de publicidad que le esperan, sí podría pagar la cláusula al Joventut (4,75 millones de euros), o al menos gran parte de ella, porque parece claro que la Penya aceptará un ligera rebaja

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