Un rendimiento por debajo de lo esperado para un joven que fue tachado en el Mundial 2006 como la principal promesa de futuro y un sinfín de rumores constantes sobre su venta han finalizado para bienestar de un Lukas Podolski que pone fin a su periplo por el Bayern de Múnich. El internacional germano volvió al club que lo lanzó a la vanguardia del fútbol profesional, un Colonia que lo recibió como el ‘hijo pródigo’.
El director deportivo del Colonia, Michael Meier, dijo que "el fútbol es el amor" y que sólo así se explicaba el retorno de Podolski pues él mismo se encargó de asegurar que llega al club perdiendo dinero y consciente de que regresa a una humilde plantilla que no puede pegarle lo que sí cobrara en Baviera.
Podolski dijo que el dinero no significa todo y aseguró estar feliz de su regreso: "Estoy muy contento de volver a casa. Quiero ayudar a mejorar, y poco a poco, el club volverá a las posiciones altas”, dijo la estrella local, que ha tenido que abandonar el Bayenr tras la llegada de Louis van Gaal y las nuevas previsiones del equipo muniqués.
Había otros destinos posibles tanto dentro como fuera de Alemania y que le hubieran proporcionado mayores cifras económicas (Werder Bremen, Manchester City y Tottenham), pero el "príncipe Poldi" siempre amó a su ciudad, a la que quiere meter en el primer nivel del fútbol germano.
Podolski tiene actualmente 24 años y ha jugado 64 partidos como internacional en los que ha marcado 33 goles para Alemania.
- Spoiler:
Goal.com