Kaká: "Quiero ganar otro Balón de Oro muy pronto"

Y critica a Laporta: "Florentino tiene un buen proyecto".
Ayer, por la mañana, Kaká habló para la televisión Globo, de Brasil, donde defendió el proyecto de Florentino de las críticas de Laporta y alabó a Cristiano Ronaldo: "Florentino tiene un buen proyecto, va a hacer un buen equipo y esas palabras (las de Laporta) son política. Y Cristiano fue una gran sorpresa. El Madrid necesita jugadores que decidan partidos". La entrevista acabó de desesperar a Dunga y el seleccionador dio a Kaká la orden de no nombrar más al equipo blanco. "No hablaré del Madrid hasta el final de la Confecup", anunció por la tarde el astro, ante la insistencia de los periodistas. Pero al final habló, cazado por esta pregunta: ¿Quiere ganar otro Balón de Oro pronto?: "Eso espero. Aunque para ello tengo que lograr títulos con mi club (el Real, ya) y mi selección. Si eso pasa, que es lo importante, luego llegarán los premios individuales". Desde que obtuvo el galardón de France Football, en 2005, Kaká se ha ido desinflando al ritmo en que el Milán envejecía. Casi igual que Brasil, a la que Dunga ha renovado con la purga de Ronaldo, Adriano y Ronaldinho. La que se enfrenta hoy a Egipto es otra canarinha más práctica, parecida a la que el propio Dunga, Mauro Silva, Bebeto y Romario llevaron hasta la victoria en EE UU 1994.

Egipto, campeón de la Copa de África, ganó su torneo sorprendiendo al contragolpe a las más potentes selecciones del África subsahariana. Los Faraones practican un fútbol agazapado y pícaro. Perdieron a Zaki, goleador de la Premier, pero mantienen arriba futbolistas ratoneros como Gomaa y Zidan. Ellos, pero sobre todo Robinho y Kaká (ese nuevo Kaká ilusionado con el Madrid) son los llamados a desbloquear lo que sobre la pizarra se plantea como una guerra de guerrillas.

La lluvia inundó el césped de hoy
Una fuerte tormenta hizo que el césped del Free State Stadium se encharcara, con lo que tanto Egipto como Brasil suspendieron sus entrenamientos oficiales. Por otro lado, Julio César, del Inter, celebró la ida de Kaká al Madrid porque "eso debilita al Milán", eterno rival nerazzurro.

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