Desde el entorno de Florentino Pérez se sugiere que la opción de Juande Ramos no está descartada. El sondeo de opinión que demostró el poco encanto de Ancelotti y la fuerza con la que el Chelsea quiere apostar por el italiano podrían dejar su fichaje por el Madrid paralizado. La sugerencia de Valdano de traerse a Pellegrini no acaba de convencer al ex presidente y su sueño dorado, Wenger, no va a dejar al Arsenal. Pero es que además cuesta muy poco ver, se mire como se mire, que lo que está haciendo Juande es extraordinario.
Lo normal es que los candidatos a la presidencia hayan tomado nota y busquen una continuidad que, como se demuestra a menudo, es la mayor garantía de éxito. Deben saber ya que Juande cuenta con el apoyo de los pesos pesados de la plantilla, incluso en decisiones tan delicadas como la no presencia de Guti en el once titular o en las convocatorias. "Aquí no se ha trabajado tan bien desde hace años", comenta en privado uno de los veteranos del conjunto blanco.
Datos. Y deben entender que los números de Juande Ramos no admiten discusión. Son 13 victorias y un empate en los últimos 14 partidos; desde su llegada ha ganado todos los encuentros fuera y, si la Liga hubiera empezado cuando aterrizó, estaría tres puntos por encima del Barcelona. Sin embargo, su persona divide no tanto a la afición como a los medios de comunicación y a los creadores de opinión. O dicho de otro modo, la opinión nunca había estado tan distante de la estadística.
Fuentes del club que llevan tiempo en el Madrid definen las críticas que recibe el juego del equipo como "la consecuencia de las guerras mediáticas y del amiguismo". Se critica al equipo por no dominar los encuentros, cosa cierta. ¿No será por falta de centrocampistas de peso? Se afirma que se echó el cerrojo tras el gol de Higuaín. Pero ¿quién se ha parado a pensar que faltaban cinco titulares en Málaga?
Se dice que llevando las riendas hay un entrenador conservador. ¿Por qué se ha preferido olvidar que se describía el juego de sus otros equipos como "espectacular", "ofensivo" y "atacante"? Se repite que es el peor Madrid de los últimos 20 años, que la plantilla es mediocre. ¿Cómo se explica, pues, el extraordinario resultado que está obteniendo Ramos?
Dudas.
Hay quien echa de menos a Schuster, que dejó al Madrid sexto antes de la llegada del manchego. "Todo lo que huele a Mijatovic y a Calderón hay que quemarlo", dice otro conocedor de lo que se cuece en el Bernabéu.
Ahora mismo, entre tanto politiqueo, cuesta hacer un análisis deportivo del Real Madrid. Frente al Málaga, ¿contó alguien los pases ofensivos bien dados desde el centro del campo? Muy pocos. ¿O el porcentaje de pases fáciles fallados? Un montón. A la plantilla le falta calidad y de ahí el esfuerzo por reforzarse atrás y esperar el picotazo de uno de los de arriba. "¿Qué quieren algunos? ¿Qué se juegue con cinco arriba y cinco atrás como el Atlético de Madrid?", se quejan en Valdebebas.
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