Valverde se destapa

Alejandro Valverde consiguió en la estación de esquí de San Isidro, en la tercera etapa de la Vuelta a Castilla y León, su primera victoria de la temporada 2009. Lo hizo con el dorsal 18, que, casualidades de la vida, es el número de la bolsa de sangre en posesión del Comité Olímpico italiano (CONI): la prueba con la que se ha abierto una investigación judicial en su contra, todavía pendiente de una sentencia.

Pero Alejandro es muy, muy bueno y sigue con la misma facilidad para ganar de siempre, aunque únicamente haya competido este año en Mallorca y Haut Var. Y aparentemente se le ve relajado, sin rastro de presión. El día de la contrarreloj de Palencia se echó un sueñecito antes de realizar un poco de rodillo: "Si casi no hace falta calentar". Luego perdió 2:07 en 28 kilómetros. Ayer, en un tendido puerto de segunda, terreno propicio, venció como él mejor sabe. Aguantó el ataque del euskaltel Rubén Pérez y saltó a 200 metros de meta, donde su punta de velocidad resulta infalible con la carretera empinada. Cuando el murciano se haya retirado y algún corredor logre un triunfo similar, al sprint en una subidita, la gente le recordará: "Mira, éste ha ganado a lo Valverde".

A sólo dos kilómetros de la llegada, los supervivientes de la escapada del día fueron absorbidos. Paco Mancebo (muy motivado en las tres jornadas), Ricardo Serrano, Pablo Urtasun, Raúl Santamarta, Lucas Euser y Serge Pauwels habían tenido un colchón de más de cinco minutos. Pero el Caisse d'Epargne sabía que no debía dejar escapar la posibilidad de que el murciano rematara la faena, y tiró a bloque junto al Astaná.

Como las suaves rampas de la ascensión a San Isidro no dieron para grandes alegrías (ni tampoco el equipo de Johan Bruyneel, que controló con mano de hierro), no se produjeron movimientos significativos entre los favoritos a la general. Alberto Contador se ha guardado la bala, si es que finalmente dispara contra el líder de la clasificación general, su compañero Levi Leipheimer, para la etapa reina de hoy, con final en alto en el último de los dos puertos de primera: El Peñón y Laguna de los Peces.

Colaboración. Sin embargo, Contador y Leipheimer se han hartado a declarar estos días lo poco que les importaría que el otro acabara con el maillot burdeos. Contador: "Hoy ayudaré a Leipheimer, que es el líder en esta prueba. Somos profesionales y, si gana él, es como si ganara yo". Leipheimer: "Da igual quién sea el primero en Valladolid, el caso es que vista del Astaná". A pesar de la fachada, Alberto está a sólo 16 segundos de su tercera victoria consecutiva en la Vuelta a Castilla y León. Demasiado goloso.

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