La crisis que ahoga a los equipos de la Fórmula 1 no parece que arrastrará a Renault. De hecho, es precisamente esa crisis la que puede convertir al equipo de Fernando Alonso en una escuadra más sólida económicamente. Mientras todos reducen costes a marchas forzadas, la empresa francesa ha decidido asirse a su equipo de F-1 como solución al desplome.
Flavio Briatore sorprendió hace unos días anunciando que el presidente de la compañía, el brasileño Carlos Ghosn, le había prometido más inversión en el equipo en 2009. "Carlos Ghosn ha dado la aprobación hace cuatro meses para que recibamos el apoyo técnico total a la Fórmula 1, y lo ha dado en un momento muy difícil porque todos las compañías pasan por un momento complicado al haber perdido mucho valor en bolsa, pero Renault no dudó un minuto en aumentar el 30 ó 40 por ciento el presupuesto”, aseguró el italiano.
Ganar imagen con triunfos
Esta situación parece contradictoria, ya que es pública la falta de apego del ejecutivo sudamericano al proyecto competitivo que lidera Briatore. Además, para alguien más conocido como killer cost (asesino de costes), hablar de más aporte económico en los monoplazas suena a locura, pero es que Ghosn ha llegado a la conclusión de que tras ver cómo las acciones de la compañía caían un 82 por ciento en 2008, la solución puede estar en el resurgimiento competitivo de la marca en Fórmula 1. Ganar imagen a través de nuevos triunfos.
Esta semana, Briatore fue llamado de urgencia a París por parte de Carlos Ghosn. Según los rumores la llamada era para motivar y concienciar a toda la escudería de la importancia de la temporada 2009. Renault está intentando crearse una mejor y más solvente imagen en muchos mercados emergentes y sabe que la publicidad más rentable y directa es a través del mayor espectáculo televisivo del mundo. Además, con triunfos reforzaría su proyección en mercados ya consolidados, como el europeo, donde ha pegado un bajón importante, algo más acusado que el de sus competidores.
Cambio de discurso
Ghosn ha tenido siempre un discurso de contención del gasto en la Fórmula 1, pero las circunstancias han cambiado. Hace un año apelaba a otros valores que los del dinero para conseguir éxitos. "Hay que ser prudentes a la hora de establecer una relación entre gasto y resultados. En los últimos años no ha existido tal relación. En Fórmula 1 gastar no equivale a ganar. En Renault creemos que lo que gana es la creatividad, la motivación y el talento, ayudados, claro está, de los recursos económicos necesarios para explotarlos", dijio. Ahora parece que considera más apropiado darle un empujón económico al equipo.
Fuente:Marca.com