Con la educación que le caracteriza, Ziganda comenzó la que era su rueda de Prensa de despedida, dando las gracias, principalmente a los Medios. Con la mirada triste, reconocía que su despido le había pillado por sorpresa: "Me ha sorprendido. Sabía que el tema estaba mal, ya que se iban sumando partidos y no ganábamos. Pero no intuíamos nada. Andoni (Goikoetxea) y yo estamos muy tristes, pero debemos asumirlo. Cuando nos hicimos cargo del equipo pensábamos que teníamos el mejor presidente y la mejor directiva y tenemos que seguir pensando lo mismo".
Cuco explicó las razones que la junta directiva le ofreció para justificar su destitución: "No hemos ganado y el equipo necesita un cambio. Nosotros queríamos más tiempo, disponer de todos los jugadores. Los entrenadores queremos eso y el club quiere resultados. La presión es grande y la cuerda casi siempre se rompe por el lado del entrenador".
A Ziganda le tocó ayer despedirse de la plantilla. Dice no estar arrepentido de haber renovado y que su peor momento lo vivió durante el último mes de la pasada Liga. Pese a marcharse triste, aseguró que no está dolido con el club.
El plantel esperaba un ultimátum
Cruchaga reconoció que la destitución de Ziganda pilló por sorpresa al plantel: "No lo esperábamos. Pensábamos que nos darían un ultimátum si no se ganaba al Sporting, no que fuera tan precipitado. Pero así es el fútbol y, si las cosas no van bien, lo paga el entrenador. Todo el mundo sabe qué ha sido Camacho para el fútbol y poco tengo que decir sobre él".
Fuente:Diario As.com