Rafa Nadal debutó en el Open de Australia 2010 con una victoria sobre el local Peter Luczak. El español sigue progresando en su juego y dejando buenas sensaciones de cara a su defensa del título en el primer Grand Slam del año.
Rafa Nadal (2) se impuso al australiano de origen polaco Peter Luczak por un marcador global de 7-6(0), 6-1 y 6-4 tras dos horas y treinta y tres minutos de juego, siendo el partido que abrió la jornada nocturna en la Rod Laver Arena. El partido comenzó con ligero retraso pues a pesar de los 15º de temperatura que había en Melbourne a la hora del choque, una pequeña tormenta de verano obligó a desplegar la capota del estadio y por tanto jugar con el tapete cubierto. Quizá fuera esa circunstacia la que hizo que no viéramos la versión esperada del mejor Nadal en los compases iniciales, aunque poco a poco el manacorí se fue destapando hasta acabar el partido con muy buenas sensaciones.
Nadal tuvo sus opciones en los primeros compases de partido, gozando incluso de su primera bola de break en el juego inicial, pero el español estaba excesivamente a la defensiva y parecía arrugado ante un Luczak que no dio pie al nerviosismo y que ponía en aprietos al número 2 del mundo cuando subía a la red. Llegó a gozar de una bola de break en el cuarto juego, que desperdició en un intercambio desde el fondo de la pista. Rafa tuvo otras dos bolas de break en el séptimo juego, pero no la llevó a efecto. No estaba fino, no culminaba. El australiano, jaleado por su público, lo volvió a intentar a continuación y logró la primera ruptura del partido, gozando entonces de un parcial de 5-3 y servicio. Rafa vio las orejas al lobo, se tiró a la red, logró la igualada y forzó la muerte súbita, que resolvió a su favor sin ceder un solo punto.
Tras algo más de una hora de juego, Nadal había ganado consistencia en su peso, quitándose las cadenas que parecían haberlo maniatado en la primera manga. A pesar de unos pequeños problemas en sus manos (tuvo que pedir la asistencia del 'trainer' para curar unas molestas ampollas), Rafa se mostró más fresco en este segundo parcial, donde su juego de piernas iba acorde a su potencia en el golpeo, moviendo a su rival de lado a lado de la pista y recogiendo los frutos en el marcador. Tan sólo cedió un juego el español antes de finiquitar el segundo set a su favor y dejar encarrilada la victoria.
El tercer set no tuvo apenas historia, sobre todo después de que Nadal rompiera el saque de Luczak en el juego inicial. Al australiano se le vio entregado a estas alturas de partido, sabedor de que hace falta algo más que épica para levantar dos sets a Rafa. Sin embargo, aún dejó algún golpe de cara a la galería que animó a un público respetuoso en cuyo corazón también está el español. Nadal hizo los deberes, administró la renta adquirida y solventó de buena guisa su pase a la siguiente fase. Que pase el siguiente... En segunda ronda, Rafa Nadal tendrá que medirse al ganador del encuentro que mide al argentino Leonardo Mayer y al eslovaco Lukas Lacko. El balear nunca se ha medido ante ninguno de los dos en el circuito ATP.
Fuente: MARCA