El valencianismo vivía pendiente de la primera gran decisión de Emery. El técnico eligió al ex portero del Mallorca. El balear jugó el primer partido pero no sabe si lo hará en el segundo porque siente el aliento de César en el cogote. Aun así, él está preparado para seguir compitiendo.
Antes de nada, ¿cómo está de la mano?
Bien. Por fortuna, todo se ha quedado en un susto. Fue un golpe en un entrenamiento, en el que puse mal el dedo y, después del tratamiento que he recibido y de las pruebas que se me han hecho, estoy muy bien.
Le viene bien que haya parón ahora, ¿no?
Sí, porque voy a estar parado en lo que queda de semana y, cuando volvamos el lunes por la tarde, me ejercitaré como uno más con el grupo.
Con lo que le ha costado ser titular en Liga...
(Sonríe) Jugué el primer partido. Ésa es la realidad. Nada más. Las lesiones pueden llegar en cualquier momento sin avisar. Pero, claro, si tengo que sufrir alguna, mejor que sea ahora con el parón.
¿Cómo se siente después de jugar de inicio en el primer asalto liguero?
Tengo muy buenas sensaciones, no sólo por ser el titular sino por dos hechos que son muy importantes: quedarnos con la portería a cero y conseguir una victoria ante un rival directo como el Sevilla.
¿Cuándo supo que iba a salir al campo de inicio?
Como viene siendo habitual con Unai, cuando llegamos al campo empezamos la charla técnica en el vestuario y allí dijo el once titular.
¿Y no se lo dijo antes?
No. El míster tiene la costumbre de dar la charla y la alineación en el vestuario. Por lo que tuvimos que esperar hasta ese momento para saberlo.
¿Se lo esperaba?
Yo trabajaba aspirando a ser el titular pero existía una incertidumbre y una intriga porque ninguno de los porteros sabíamos quién jugaría desde el principio contra el Sevilla.
Con esta primera decisión de Emery, ¿cree que se ha zanjado ya el debate o que es el primer capítulo de una serie que puede ser larga?
No lo sé. En el Valencia, pese a haber buenos jugadores, no hay una distinción entre titulares y suplentes. Lo cierto es que el míster debía tomar una decisión y lo hizo. Y, aunque hubiese sido yo el que me quedara en el banquillo, tampoco creería que el debate estuviese zanjado, aún quedan muchos capítulos. Nosotros trabajamos y dejamos que sean los medios y la afición los que hablen.
¿Les ha planteado Unai a César y a usted que uno jugará en Liga y el otro en la Copa y en la Europa League?
No lo sabemos y esto es algo que sólo está en la cabeza del entrenador, hacia quien deben ir dirigidas estas preguntas. Yo ya dije en su momento, y lo mantengo, que me daba igual jugar un partido u otro. Pienso que más vale pájaro en mano que ciento volando, por lo que quiero jugar cualquier partido oficial que venga por delante. Si el míster luego quiere repartir minutos, es algo que tendremos que respetar, pero esto todavía no ha ocurrido, ni con la portería ni con ningún jugador de campo.
¿Cómo fue ese momento en el que Unai dijo que jugaba usted? ¿Se cruzó alguna mirada con César?
Ocurrió como en cualquier otro momento de mi carrera en el que me anunciaron que jugaba. Es algo muy normal y creo que se magnifica de puertas hacia afuera, pero que para nosotros fue igual que cuando Unai dijo quién jugaba en partidos como el de Manchester o el de Noruega ante el Stabaek.
A partir de ahí, César estuvo a su lado, ¿no?
Por supuesto, como cualquier otro compañero, porque por encima de la competitividad está el grupo. Estuvo fenomenal, dándome ánimos y ayudándome en el calentamiento. Pero, si hubiera sido al revés, yo habría hecho lo mismo.
Dado el buen estado de forma de César, sabe que no se puede relajar ni un día...
Lo tengo clarísimo. César está muy bien y tenemos una gran competencia. Siempre lo he hecho y ahora más que nunca tengo muy presente que debo ir al máximo.
¿Se ve de titular en el segundo partido en Valladolid?
A priori, cuando un equipo gana se suele mantener el mismo bloque. Pero tanto en pretemporada como en Europa el míster ha optado por las rotaciones. Así que deberemos esperar. Yo intentaré entrenarme como si no hubiese pasado nada y esperando tener continuidad en el segundo partido.
Después de estrenarse, ¿empieza a notar ya el salto del Mallorca al Valencia?
Sí. Al margen de la pretemporada y los amistosos, ante el Sevilla empezó el lío de verdad y, viendo el campo lleno y con los primeros puntos en juego, noté que era jugador de un equipo grande como el Valencia. Sólo el entorno me hizo ver que esto es algo distinto.
¿Entiende que se haya disparado la euforia después de ganarle bien al Sevilla?
Hemos dejado buenas sensaciones, porque resolvimos muy bien la papeleta de ganar con solvencia a uno de los grandes de la Liga. Pero esto no debe llevar a la gente a guiarse por la lógica, porque ésta no existe en el fútbol. Después de ganarle al Sevilla, muchos nos pedirán que le ganemos al Valladolid por 0-3. Y ahí se equivocarán, ya que tenemos que ir paso a paso sabiendo que cada partido es un mundo.
Lo que sí le van a pedir este año es que entren en Champions. ¿Tienen razones para hacerlo?
Tenemos una plantilla muy competitiva y le ganamos al Sevilla. Pero esto no quiere decir que ya estemos ahí. Hay que ir paso a paso con ambición.
Del teórico grupo perseguidor del Barça y Madrid, los únicos que cumplieron en el estreno liguero son ustedes...
Es sólo una jornada que sirve de referencia, pero no para echar las campanas al vuelo. Además, fuimos los únicos locales porque el Sevilla, el Villarreal y el Atlético jugaron fuera. Pero todo lo que sea empezar bien es bueno y ahí están esos puntos de ventaja.
Ha empezado la temporada y con tranquilidad en lo social. Qué bueno es esto, ¿no?
Sin duda. Desde el momento en el que llegué, en el que había tanto revuelo, siempre me pareció que el Consejo lo sacaría todo adelante porque me habían hablado muy bien de Llorente y de su capacidad. En la comida del otro día nos dijeron que las cosas estaban tranquilas y que nos tocaba cumplir a nosotros en el campo.
Como portero de un grande, ¿mira con otros ojos los partidos de estos días de la Roja?
Como aquel que dice, llevo un día en Valencia y mi objetivo es hacer bien las cosas aquí. Si me llega el premio, estaré satisfecho. Pero no me obsesiona. Pasé por todas las categorías inferiores y estaré encantado con debutar con la absoluta.
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