La baja de Cesc Fábregas no minará la capacidad del Arsenal en el partido que el conjunto de Londres disputará mañana, miércoles, en el Emirates ante el Celtic, en opinión de su entrenador, Arsene Wenger.
Ambos clubes compiten por un lugar en la fase de grupos de la Liga de Campeones, y la plantilla de Wenger parte con la ventaja que le dio la victoria por 0-2 lograda en la ida.
Fábregas no ha sido incluido en la convocatoria del "míster" galo al haberse lesionado el pasado sábado durante el compromiso liguero disputado ante el Portsmouth.
No obstante, se trata de una lesión menor en el muslo que en principio no le apartará del compromiso liguero del fin de semana ante el Manchester United.
"El escáner al que se sometió Cesc ha sido bastante tranquilizado", indicó Wenger a los medios británicos.
El técnico explicó que pese a esto al medio le llevará "unos cuantos días" recuperarse del todo "y hay una posibilidad de que esté listo para la visita a Old Trafford".
En cuanto a las metas inmediatas del club, el francés señaló que su objetivo de mañana es "ganar el partido" pese a la ausencia de su talismán en el medio campo, Cesc Fábregas.
Pese a mostrarse positivo, Wenger quiso mantenerse cauto: "El trabajo no está hecho, no está terminado, es un trabajo por terminar y así es como yo me lo tomo".
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