Mariano Pernía abandonó ayer la UVI del hospital Austral de Buenos Aires y ya descansa en planta, tras el accidente de tráfico que sufrió. La evolución del jugador está siendo favorable, según fuentes del Atlético.
Por la noche, el defensa del Atlético concedió al programa El Larguero de la Cadena SER la primera entrevista tras el accidente: "Fue un susto grande, pero sobre todo porque iba con mi hija y mi sobrino. No recuerdo nada, me desperté a los tres días en el hospital. Lo peor era el pulmón porque tenía un derrame. Tengo seis fracturas. El 7 de julio volví a nacer, va a ser una fecha que siempre vamos a recordar por el nuevo nacimiento".
Además, en otra entrevista añadió: "No recuerdo el golpe, ni cuando me sacaron del coche, ni cuando me trasladaron a Buenos Aires. Tampoco los dos primeros días en el hospital. Estuve cuatro días prácticamente más allá que acá". Pernía, internacional por España y nacido en Argentina, se mostró "muy feliz" de que su sobrino y su hija, que viajaban con él, no sufrieran daños y de que solamente tenga "cinco huesos rotos y ningún problema de vida o muerte. Tuve un fuerte golpe pulmonar. Tenía un derrame muy grande y tuvieron que poner un drenaje para ver si mi cuerpo rechazaba ese líquido que había en los pulmones. Por suerte, lo rechazó más rápido de lo que esperaban y me lo pudieron quitar", añadió.
Sobre su vuelta a los campos de fútbol sentenció que "cuando pueda volver a jugar" lo hará en el Atlético de Madrid con el que aún tiene un año de contrato.
Como se recordará, Pernía sufrió en la noche del 7 al 8 de julio un accidente de tráfico a tres kilómetros de la localidad argentina de Rauch. El jugador sufrió politraumatismos después del golpe que dejó hecho un amasijo de hierros el coche de alquiler en el que se desplazaba junto a su hija y su sobrino. Los dos pequeños salieron despedidos del vehículo y la niña tiene una fractura de clavícula. as