La ex tenista estadounidense Chris Evert se unió a las críticas que han recibido en las últimas semanas los gritos de algunas jugadoras, considerando que son "molestos y estridentes" y "cada vez más fuertes".
"Gritar es una cosa, pero el estridente sonido que se oye hoy en día con las jugadoras y, especialmente, cuando consiguen un punto ganador, es otra. Además, muchas veces el grito va antes de golpear a la bola. Eso es lo que observo yo como jugadora", indicó la ex número uno mundial en Sydney, donde se encuentra con su marido Greg Norman, que anunció que disputará el Open de Australia de golf los tres próximos años.
Asimismo, Evert consideró que es "muy molesto" escuchar esos gritos durante los partidos, ya que son "cada vez más fuertes" y "más estridentes, ahora, con las nuevas jugadoras". "Steffi Graf golpeaba la bola muy fuerte y nunca gritaba. Ha habido un montón de jugadoras que le pegaban muy duro y nunca se escuchaba ni un ruido de ellas. No entiendo la filosofía que hay ahora", comentó.
Sharapova y De Brito, en el punto de mira
El malestar por los gritos de algunas tenistas ha llegado a crear un problema en Wimbledon. Las quejas por parte de algunas jugadoras y también del público han obligado a la organización de torneo a plantearse multar a las tenistas que se excedan en sus alaridos.
Las dos jugadoras que están en el ojo del huracán son la rusa Maria Sharapova y la joven portuguesa de 16 años Michelle Larger de Brito. La rusa ya había recibido quejas por su volumen a la hora de gritar, pero De Brito supera incluso el nivel de decibelios de Sharapova.
- Spoiler:
Marca.com
