El diario MARCA, en su edición del miércoles, publica un estudio sobre los gritos de las tenistas durante el torneo de Wimbledon.
En un minucioso reportaje de Joan Solsona se analiza el ruidoso juego de la portuguesa Michelle Larger de Brito. A la lusa se le han medido en 110 decibelios, los mismos que Maria Sharapova. La intensidad de sus aullidos es comparable al ruido de una avioneta en el instante de aterrizar.
"Al que no le guste, que se vaya”, aclara la portuguesa de tan sólo 16 años.
La maestra Sharapova hacía lo propio en la pista número 1 ante la ucraniana Viktoriya Kutuzova, que estuvo a punto de jugar con tapones. Su rival llegó a 101 decibelios tras una derecha ganadora.
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