Rafa Nadal debutó con una trabajada victoria sobre Potito Starace en su camino hacia el oro en Pekín. Un oro que ya no podrá obtener Tommy Robredo, que no pudo pasar de primera ronda al caer ante el italiano Andreas Seppi. En féminas, María José Martínez dio la de cal al doblegar a Alicia Molik, mientras que Carla Suárez cayó eliminada ante Shuai Peng.
El tiempo respetó el debut de Nadal. El cielo estaba encapotado y la temperatura no era elevada, incluso corría una brisa de vez en cuando que enfriaba la sensación térmica. Las gradas de la Pista Central no estaban llenas, pero poco a poco se irían llenando, con la presencia del Príncipe de Asturias y el presidente de la RFET, Pedro Muñoz, incluídos. Un estreno que terminó victoria de Nadal sobre Starace por un marcador global de 6-2, 3-6 y 6-2 tras dos horas y catorce minutos de juego.
El de Manacor salió desde el principio a por todas, si bien Starace es de ese tipo de jugadores que no se amilana ante nadie. El comienzo fue lento, con mucho intercambio de golpes, pero llevando la batuta de la orquesta siempre el sacador. Quince minutos y tres juegos tardó el balear en romper el servicio y la moral del italiano, que veía cómo el cielo se nublaba más ante sus ojos.
Amenazaba lluvia. El tornado español tuvo que cambiarse la camiseta una vez que rompió a sudar y calentó tanto su maquinaria que no dio opción alguna a Starace, que solo pudo ser testigo del parcial de 6-2 que le endosó Nadal en el primer set.
Starace se vino arriba en el comienzo del segundo acto y, tras aprovechar su primera opción de break al resto, se fue al primer asueto con una ventaja de 3-0 en el luminoso. Una desventaja que Nadal tuvo hasta cuatro opciones de recuperarla, pero no lo hizo. Al de Manacor no se le veía cómodo y terminó pagando el pato y cediendo la segunda manga con un parcial de 6-3. Hora y media de juego y vuelta a empezar.
En el tercer acto llegó lo que Nadal buscó durante todo el encuentro, uno de esos puntos impresionantes que hizo levantar al público de sus asientos y al español celebrarlo con gesto de rabia tumbado en la pista. La balanza terminó de desequilibrarse en el sexto juego. Rafa rompió el saque de Potito y enfiló el camino hacia una victoria final merced a un último parcial de 6-2. Las sensaciones globales no han sido las esperadas, pero el propio Nadal sabe que él siempre va de menos a más.
Tras esta victoria, Nadal habrá de enfrentarse en segunda ronda con el ganador del duelo entre el australiano Lleyton Hewitt y el sueco Jonas Björkman.
Robredo se despide en su estreno
El español Tommy Robredo, por su parte, no pudo completar la remontada que inició contra el italiano Andreas Seppi y fue eliminado en la primera ronda tras perder por 6-4, 4-6 y 8-6 contra el transalpino, que jugará ante el checo Tomas Berdych.
La lluvia dejó sin finalizar el duelo entre el español y el italiano. Fue entonces una buena decisión para el tenista de Hostalric, que en el momento del cese del choque caía por 5-2. No mejoró Robredo en la reanudación y el italiano cerró la manga después de dos horas y media.
Sin embargo, el jugador español emergió. Rompió el saque del transalpino y adquirió en el segundo set una notable ventaja, que le llevó a igualar el partido.
No es el 2008 el mejor año del catalán, caído hasta el puesto 17 del ránking y con el éxito en Bastad como su único logro. Fue finalista también en Varsovia. Un bagaje escaso para un jugador que durante tiempo estuvo en el top ten.
La inestabilidad que demuestra su juego en este ejercicio reapareció en el tercer set. En realidad lo hizo antes. Pero tenía margen suficiente para llevar el choque a la última manga. Con más coraje que juego alargó el encuentro. Titubeó en sus últimos saques. Y Seppi, una raqueta sólida y con experiencia, no desechó la opción para apear al español del cuadro individual de Pekín