El argentino Sergio ''Maravilla'' Martínez, campeón superwelter del Consejo Mundial de Boxeo (CMB), afirmó a EFE que este deporte "está muriendo" en España, víctima de una cultura que lo rechaza y lo relega por razones políticas.
"El boxeo no es religión, no es cultura, no está bien visto en España, ese es el problema", comentó Martínez, nacido en Quilmes (Argentina) en 1975 y radicado hace siete años en España, donde ha pasado parte de su trayectoria en los cuadriláteros.
De visita en Xcaret (México) para recibir el cinturón de campeón superwelter del CMB, título que en su momento tuvo el español Francisco Javier Castillejo, Martínez hizo un duro diagnóstico del momento que pasa el boxeo en España.
"Hay muchas razones pero la mayor es el movimiento político, nada más que eso. Cada día hay menos boxeadores, menos gimnasios, menos entrenadores, menos escuelas: el boxeo está muriendo en España", dijo ''Maravilla'' Martínez con un marcado acento castizo.
Explicó que en España "no se sabe" el avance de este deporte en favor del boxeador. "Hay que mostrarle al público que (el boxeo) tiene una cara más limpia de la que realmente suponen, sólo pasa eso, nada más", añadió.
Martínez ganó el titulo interino superwelter del CMB al derrotar al congoleño Alex Bulema y lo retuvo al empatar con el puertorriqueño Kelmer Cintrón.
El CMB lo ha declarado campeón en lugar de Pernell Forrest, estadounidense que dejó el cinturón sin combatir por una supuesta lesión, explicó a Efe Mauricio Sulaimán, secretario ejecutivo del organismo.
La trayectoria de ''Maravilla'' con los guantes comenzó al no cumplirse su primer deseo de ser futbolista. Eligió el pugilismo como profesión y llegó a la cúspide al ser campeón mundial, con una marca de 44 victorias en 48 combates, con tres derrotas y un empate.
"Yo tuve la suerte, fui afortunado, de poder salir de este camino que está llevando el boxeo en picada y pude destacarme y hacer carrera", afirmó este peleador que divide su tiempo entre España y Estados Unidos, entre el boxeo y una dura cotidianeidad.
Martínez habló de la gran tradición del boxeo en Argentina, que "contó con grandes campeones siempre, con Carlos Monzón a la cabeza", y elogió a Omar Narváez, campeón de la división mosca de la Organización Mundial de Boxeo (OMB).
"Tengo la suerte de venir de un país en el que el boxeo no está muerto, está pasando por una época de crisis, quizá, pero es la misma crisis que arrastra el mundo entero", manifestó.
El campeón mundial divide su tiempo entre Madrid y Los Ángeles, ciudad en la que suele pasar varios meses para tener una mayor actividad como boxeador, ya que en España apenas puede tener uno o dos combates al año y tiene que buscarse otros trabajos.
"Estados Unidos y México van en la punta, por historia, pero en países como Argentina y España el boxeo está muy mal pagado, no se tiene cobertura médica y social en un 99 por ciento, el boxeo está abandonado a la mano de Dios", explicó.
El campeón comentó que en este panorama, el púgil tiene que buscar alternativas porque "con una o dos peleas al año y con bolsas equivalentes al salario de un mes de un obrero o empleado y con eso no se puede vivir y para estar en el ''top ten'', tienes que dedicarte el cien por cien,".
- Spoiler:
as