Hoy empieza una de las eliminatorias más importantes desde que llegó al Madrid.
Es una gran oportunidad y vamos con confianza porque podemos ganar en Atenas.
Hace un año cayeron en El Pireo, ¿les servirá eso ahora?
Seguro, esta vez no habrá sorpresas: conocemos al rival, al público, el pabellón
En el Olympiacos están ahora Vujcic y Halperin, sus verdugos en el Maccabi.
Sí, sí, la motivación es total. Su plantilla es muy, muy buena y han hecho grandes refuerzos; aunque al final lo que vale es cómo juega el colectivo y ahí están nuestras opciones.
Habrá bengalas y de todo, ¿eso les intimida?
No nos preocupa; los que se sentirán presionados son ellos. Han apostado muy fuerte, con un equipo muy caro... sólo les vale llegar a Berlín. Así pueden pasar dos cosas: que digan, ¡uf!, hay que ganar los dos partidos en casa, y se atasquen; o que llevados por su público lo hagan realmente bien.
En Grecia dan por hecha la clasificación del Olympiacos.
Sí, con los que yo he hablado dicen que el Madrid no tiene ninguna opción. Yo por eso me voy a motivar aún más.
¿Un ritmo alto hará daño a Vujcic y a Papalukas?
Sí, claro. Hay que contrarrestar su experiencia. Queremos correr y sacar ventaja.
Si Childress cobra más de cuatro millones de euros, usted podría pedir lo mismo.
Se lo dan por decisión del dueño y porque viene de la NBA. Si pagas ese dinero es obligatorio ganar.
Y enfrente el Madrid, sin Final Four desde 1996.
Sí, es nuestro gran reto.
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Fuente:As
