El KERS, el ya famoso sistema de recuperación de energía, está siendo un quebradero de cabeza para ingenieros, mecánicos y pilotos. Como informa el diario MARCA, pesa entre 25 y 40 kilos, por lo que influirá enormemente en el equilibrio de los coches y obligará a adelgazar a los pilotos.
En esto Fernando Alonso es también el líder. El asturiano ha pasado de los 70,5 kilos a los 67 gracias a maratonianas jornadas de ciclismo de más de 100 kilómetros junto a profesionales como Samuel Sánchez. Otros, como Robert Kubica, lo tienen peor: ha perdido 12 kilos en un año y medio y revela que no puede seguir adelgazando porque pondría en riesgo su salud.
Fuente:Marca