El Atlético de Madrid acumuló una jornada más sin vencer ante un Málaga que se mantiene con los mismos puntos que los rojiblancos, al acecho de la zona UEFA. Mejoraron los de Aguirre respecto a los últimos partidos pero no les sirvió para llevarse la victoria de La Rosaleda, escenario de un partido igualado que mereció terminar con más goles que los que reflejó el marcador (1-1). Al contrario que en otros muchos partidos, salió el Atlético concentrado y a punto estuvo de marcar en el primer minuto por mediación de Agüero, que se marchó de Welligton y obligó a intervenir a Goitia cuando se estaba ajustando todavía los guantes.
Sinama, titular en la derecha en lugar de Maxi, dispuso de la siguiente gran ocasión en el ocho tras una contra fulgurante que terminó sin el premio del gol. Remató mal el francés y la sacó Goitia con el pie. Mandaba el Atlético en el partido tras completar unos buenos veinte primeros minutos hasta que la fortuna le dio la espalda. Concretamente la de Assunçao, que desvió un remate de Apoño desde fuera del área que se coló por encima de Leo Franco.
El Atlético repite jugada
El golpe de suerte espabiló a un Málaga que había entrado de puntillas al partido y desanimo al Atlético, que debía ir ganando y se veía perdiendo. Invertidas las tornas, estuvo a punto de llegar el 2-0 en una buena combinación entre Luque y Baha. El descanso se antojaba lo mejor para que el Atlético buscase soluciones pero las encontró en el minuto 44 en una jugada bien aprendida. Antonio López puso perfecta una falta lateral desde la derecha y Heitinga, totalmente solo, marcó de rebote tras fallar en primera instancia un gol cantado. Se está convirtiendo en algo habitual ver al Atlético marcar de la misma manera, como ya demostró Sinama ante el Almería y contra el Barça en Copa.
El francés se quedó en el vestuario y en su lugar entro Maxi para intentar buscar el triunfo. El partido siguió disputándose al límite con Apoño ganando la batalla del centro del campo mientras que empezaron a llegar las tarjetas y las ocasiones. Se la inventó Duda en el 60 cuando envenenó una falta lateral destinada a ser un centro y casi sorprende a Leo Franco, que tiene la costumbre de estar siempre dos pasos por delante de lo aconsejable.
La pólvora se esfumo al final
Poco después se encontraron Maxi, Forlán y Simao en el área del Málaga pero el portugués mando su remate a los pies de Helder con Goitia batido. Quizá el Kun la hubiese metido pero el argentino, que sigue peleado con el gol desde Navidad, apenas dispuso de oportunidades para romper su mala racha.
En el 79, el Málaga tuvo la posibilidad de ganar pero Baha la desperdició en un mano a mano ante Leo Franco. Y cuando parecía que el empate era inamovible llegó la ocasión clarísima de Ujfalusi, que remató en el área pequeña de cabeza una falta lateral y obligó a Goita a despejar a córner para evitar que su equipo perdiese. Pese a que el Atlético es incapaz de ganar un partido en 2009, logró recortar otra vez un punto al cuarto clasificado. No todo son malas noticias a orillas del Manzanares.
Fuente:Marca