En el Real Madrid se han gastado más de 40 millones en los fichajes invernales de Huntelaar y Lassana Diarrà, y el planteamiento que se hacen ahora en los despachos del club es que sólo llegará un jugador para la banda derecha si es en calidad de cedido. No se quiere gasta ni un euro más en otro refuerzo.
El Real Madrid quiere a Milos Krasic, jugador serbio del CSKA de Moscú, en préstamo y con una opción de compra. Ramón Calderón y Pedja Mijatovic sólo estarían dispuestos a pagar 1,5 millones de euros al club ruso por la cesión de este futbolista para lo que resta de temporada. Krasic, uno de los futbolistas que más gusta a la dirección deportiva del club, sólo vendría al Real Madrid como cedido. Si no es así, la opción queda prácticamente descartada.
fuente:marca.com