El presidente del Barcelona tiene desde ayer un nuevo episodio de irritación en público. A sus conocidos numeritos en un aeropuerto, en los palcos de Old Trafford y Montjuïc, en un congreso de peñas del club y hasta en plena avenida Diagonal, Joan Laporta añadió una agria disputa verbal en un juzgado de Barcelona.
Citado a declarar en el juicio por Raúl Baena, a quien el Espanyol contrató procedente del Barça (según este club, de manera ilícita, por lo que reclama 3,5 millones de euros en compensación), Laporta resultó la figura destacada en el juzgado de Primera Instancia número 29.
En medio de un gran ruido mediático, tras la declaración de Baena le tocó el turno a Laporta. El presidente pidió a María del Pilar Ledesma que le relegara de su declaración. La jueza atendió la petición de Laporta, que se encendió cuando Felipe Izquierdo, abogado de Baena, le recriminó que "no supiera nada del asunto". "Parece que usted sólo está en el Barcelona para realizar viajes protocolarios", añadió.
Laporta, encendido, descargó con ira: "¡No me insulte! ¡Si hemos venido aquí para montar un espectáculo, mal vamos!", dijo varias veces, antes de levantarse a firmar el documento para ser relevado de declarar. Acto seguido, Laporta, señalando a Izquierdo con el índice, le espetó: "Lamentable". Antes de abandonar la sala, se acercó a Baena y le dijo, irónico, "mucha suerte, chaval".
Fuente:Diario As.com