La Unión Europea sacará adelante la llamada Agenda Digital, acuerdo global cuyo principal objetivo es lograr que en 2020 todos los ciudadanos europeos tengan acceso a Internet de banda ancha de más de 30 megas y que la mitad de los hogares estén abonados a conexiones ultrarrápidas de más de 100 megas.
Crear un mercado único electrónico o impulsar la cultura en este ámbito serán algunos de los otros objetivos que recoge el texto, pero aumentar las velocidades de conexión de los usuarios se antoja necesario ante los nuevos servicios que ofrece la Red.
Respecto a las zonas rurales donde es más complicado el acceso a la banda ancha por falta de inversión de los operadores privados, se recurrirán a ayudas públicas nacionales, de la Unión Europea y a préstamos del Banco Europeo de Inversiones (BEI).
Con el objetivo de generalizar las conexiones ultrarrápidas en territorio europeo, el Ejecutivo comunitario pretende incentivar las inversiones en redes de fibra mediante una recomendación que publicará a lo largo de este año.
Otro de los puntos clave de la Agenda Digital y sobre el que ya se ha hecho hincapié es el referido a la banda ancha móvil. La comisaria quiere que determinadas frecuencias del espectro (800 MHz) que han quedado libres con el paso de la televisión analógica a la digital se utilicen obligatoriamente en toda la UE para Internet móvil de alta velocidad.
