La afición recibió a Canales como el héroe del Racing

El Racing fue recibido en la localidad de Hoznayo la madrugada del miércoles al jueves por medio millar de aficionados tras su histórica clasificación para disputar las semifinales de Copa, siendo Sergio Canales el jugador más aclamado. Los hinchas verdiblancos volvieron a repetir la estampa vivida hace dos temporadas, cuando el equipo cántabro eliminó al Athletic en cuartos en San Mamés e hicieron parar al autobús a mitad del camino de vuelta, justo a 22 kilómetros de Santander. Aquella vez, Canales estaba en el equipo filial, pero en esta ocasión fue el gran protagonista. Primero en el terreno de juego y después en la fiesta.

La plantilla se emocionó con el gesto de cariño, se fotografió con los fans, firmó autógrafos y a continuación subió al balcón del Hotel Adelma para devolver las muestras de afecto. Allí se pudieron escuchar los cánticos de apoyo a Munitis, Portugal o Xisco y, sobre todo, las felicitaciones a la perla del Racing y futuro jugador del Real Madrid tras haber completado un partido espectacular frente a Osasuna y haber marcado un gol de falta por la escuadra.

Canales, alentado por sus compañeros, se dirigió a la afición para agradecer el apoyo incondicional y, aunque se mostró inexperto y tímido en su discurso, dio muestras de la gran ambición que tiene: "Vamos a darlo todo para que podáis tener la oportunidad de animar en una final. Quiero traeros el título para que lo celebremos aquí todos juntos".

El equipo llegó a Santander a las 2:10 y, a pesar del frío polar, también fue recibido por medio centenar de aficionados en El Sardinero.

"Nos vamos a dejar la vida"

Canales fue el héroe de la noche de Copa y la gente le hizo saber que ya es el líder del equipo ("¡Canales quédate!" le cantaron). Sin embargo, no se olvidaron de otros pilares básicos en el éxito del equipo. Por eso también pidieron la continuidad de Xisco (cedido por el Newcastle) mientras descorchaba champán y reconocieron la labor de Munitis y Portugal. Estos coincidieron en su discurso: "No vale de nada haber llegado hasta aquí. Queremos ganar la Copa y nos vamos a dejar la vida en ello".

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