París (Francia).- Hay quien afirma que el fútbol está reñido con la cultura. No vale esta máxima con Thuram, ex jugador francés del Barça, que ha escrito un libro tras retirarse del fútbol. ‘Mis estrellas negras’ es una obra en la que recuerda a grandes personajes que lucharon por los derechos de los negros, como Malcolm X, Luther King o Mandela. También desvela por qué rechazó un ministerio de manos del presidente francés Nicolas Sarkozy.
Lo primero que quiere dejar claro Thuram es que no se trata de una obra que se aproveche de la discriminación positiva, sino una reflexión sobre el juego de razas en la vida a través de los orígenes y sus propias vivencias. “Hay que salir de la prisión de los colores, descolonizar los espíritus cambiando los imaginarios colectivos”, escribe Thuram en su libro.
Thuram es francés y desde pequeño ha aprendido a ser el único negro en la clase. “La primera noción que se tiene de los negros en el colegio es la esclavitud […] y yo me sentía angustiado, marcado con un hierro a fuego lento. Nadie me dijo que también había filósofos negros, científicos, pintores, poetas o un soberano”, explica en una entrevista al diario ‘DXT’.
Ahora, incluso hay un presidente negro en la Casa Blanca. “Obama ha aparecido en un momento de crisis aguda, no solamente económica, también moral. Estamos confrontados a la insoportable desigualdad de los pueblos y a la degradación de nuestro planeta, que comienza a no soportarnos”, ha dejado escrito Thuram en su obra.
El presidente francés, Nicolas Sarkozy, le puso en bandeja una cartera ministerial tras su retirada del fútbol por un problema coronario. Thuram no sólo la rechazó por entender que se le usaba como coartada de la integración, sino que se erigió en contra de la política de Sarkozy. Thuram ha declarado que huía de tentaciones xenófobas y populismos a la vez que reprocha al mandatario el enfoque autoritario y excluyente del debate nacional sobre la identidad.
Thuram recoge en el libro como anécdota el ejemplo del abuelo del también futbolista Karembeu, expuesto en un museo como criatura exótica subhumana por su físico opulento y cerebro minúsculo. Otros deportistas como Muhammad Alí, boxeador, aparecen con sus palabras que quedarán para la historia: “Dentro de 100 años dirán que fui blanco. Como le pasó a Jesús”.