La selección española de balonmano se complica su pase a las semifinales del Europeo de Austria al perder con claridad contra Polonia (32-26). En ningún momento se vio a los de Valero Rivera metidos en el partido ante un rival que demostró que es claro favorito al título. Ahora no queda otra que ganar a Alemania y a Eslovenia y esperar a lo que hagan tanto los polacos como los franceses que, además, se enfrentarán entre sí.
Esta vez no fue el día de los jugadores españoles. No salió absolutamente nada. Lo único que se hizo bien fue seguir con el cien por cien de acierto en los siete metros. Aguinagalde brindó la oportunidad a Iker Romero de seguir aumentando su enorme estadística y el vitoriano marcó hasta penas máximas. Pero eso no sirvió de nada.
En defensa estuvieron blandos. No funcionó ni la defensa 5-1 ni la 6-0. Y en ataque fue aún peor. Los pases eran casi siempre imprecisos y tampoco hubo contundencia contra una defensa polaca que fue un muro. Y si el muro se abría, aparecía Szmal, el mejor portero de este torneo junto a Omeyer. Para colmo, ellos tuvieron la fortuna de encontrarse con casi todos los rebotes que se producían.
España aguantó apenas quince minutos. Lo hizo mientras Aguinagalde consiguió sacar siete metros, porque el juego exterior de la selección no apareció. Ni los Entrerríos, ni Chema Rodríguez, ni Romero, ni nadie. En cambio, Polonia nos 'frió' a goles con Bartosz Jurecki y con Jurasik. La mejor noticia es que al descanso la desventaja era solamente de cuatro goles (13-9).
Sin capacidad de reacción
El problema es que la segunda parte fue, incluso, peor. En ningún momento hubo un pequeño atisbo de reacción. Lo más cerca que estuvo España de Polonia fue a tres goles y la mejor racha de los de Valero Rivera fue un parcial de 4-0 en el ecuador de la segunda mitad, pero para entonces el partido estaba casi resuelto.
No quedaba otra que intentar perder por la menor diferencia posible porque el 'golaverage' podría ser clave para decidir el pase a semifinales. Pero no era el encuentro de nuestra selección. Ni las superioridades numéricas eran aprovechadas para recortar la renta polaca. Esperemos que España se haya guardado muchos goles para afrontar los duelos contra Alemania y Eslovenia, porque buena falta le van a hacer. La pena es que puede que eso no sea ni siquiera suficiente para pasar.
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