Canales arregla la pifia de 'Pini'

Tema: Canales arregla la pifia de 'Pini' Lun Ene 18, 2010 11:50 pm

La progresión de Canales no para de acelerarse. Y lo que es mejor, nadie sabe cuándo se frenará. Las declaraciones de ayer de Del Bosque ("no es joven para ser convocado") han agitado al racinguismo, aunque habrá que ser cautos. De momento, sobra con relamerse con sus últimas exhibiciones Ante el Valladolid dio otra. Su partido fue exquisito y revaloriza aún más su valor ante los ojos de una decena de ojeadores, pero no es únicamente eso lo que se le agradece. Su manera de resolver en el área en el tanto del empate es para grabar y enmarcar. Por eso, hoy nadie hablará de la calidad de Medunjanin ni del enorme talento de Diego Costa, como tampoco se sabrá valorar que la defensa del Racing está inmensa o que Munitis recuerda al de sus mejores tardes. La obra de arte del canterano hará que todo lo demás sea trivial y, cómo no, vuelva a abrir esta tarde los telediarios de aquí y de allá. Lo merece. Porque no es la primera vez que regala una joya y me da que tampoco será la última. En la jugada clave, Sergio rompió en velocidad a la defensa como ya hizo hace una semana a la del Sevilla en el Pizjuán. Esta vez corrió en busca de un magistral pase de Munitis al hueco. Allí, a orillas del gol, controló ayudado por su zurda con la magia de los grandes y, tras dejar que el esférico diese un solo bote, hizo una precisa vaselina a Justo Villar con la derecha, su pierna menos buena. Enorme.

Justicia. Su nueva perla arreglaba un marcador engañoso ante un Valladolid ordenado y ramplón, porque el Racing había comenzado perdiendo por mala suerte. En la desafortunada acción del tanto vallisoletano, Medunjanin, pura clase, botó un córner cerrado al primer palo. Diop no acertó a despejar y Pinillos, que estaba junto al poste y no pegado a él, introdujo el balón en su propia portería. Era el minuto 18 y el Racing, tras un inicio prometedor, se descompuso. Volvían los fantasmas.

Hasta ese momento había hecho las cosas bien. Sobre todo circuló con criterio, basado en la inspiración de Canales, del que todos conocían su visión de juego y pocos su facilidad para buscarse la vida entre murallas y definir. Sin embargo, cuando el marcador le castigó se vio superado en la zona de elaboración por las buenas maneras de Lázaro y se vio amenazado por las galopadas de Diego Costa.

El Valladolid tuvo la oportunidad de crecer partiendo de la desconfianza local y la desaprovechó. No supo aguantar la posesión. Borja, que puede realizar esas funciones, actuó escorado a la banda y Baraja jamás halló su lugar. Aun así, el conjunto de Mendilibar aguantó con oficio las embestidas de su rival para arañar un punto muy valioso que le saca de su mini crisis. Aunque, eso sí, vio peligrar su premio en más de una ocasión. Primero cuando Munitis cayó en el área en el 45' con más pinta de derribo que de simulación. O también en el momento en el que el propio capitán sirvió a Serrano y éste se estrelló con Justo Villar. E incluso cuando Geijo primero se desmayó en el área pidiendo penalti (sin razón) o al enviar éste a las nubes una oportunidad manifiesta.

Satisfacción. El partido tenía pinta de ser injusto con el Racing y caritativo con el Valladolid porque los de Portugal habían tenido más intensidad, ocasiones y mordiente. Pero cuando el cuadro cántabro pudo arrinconar a su adversario, el técnico burgalés sustituyó a Canales, siendo Serrano el que lo pedía a gritos. Cierto es que la gasolina se le acaba pronto a Sergio, como también es una realidad que en partidos cuesta arriba más vale artista caminando que obrero peleón. Su cambio desmontó al equipo montañés, apagó sus ideas y espoleó a Arzo y Prieto, liberados de su marcaje. Ellos mantuvieron el tipo y permitieron al Valladolid consolidar un punto que era vital para no permitir que un rival directo, como el verdiblanco, se escapase en la tabla. Para la afición de El Sardinero el partido también tiene una lectura positiva. La mejor. Sabe que tiene un nuevo líder y que lo disfrutará algún tiempo más.
El detalle: Lázaro y Mario Ortiz debutaron en primera

Portugal hizo debutar en Primera en el 88' a Mario Ortiz: "Ha sido un debut amargo, porque no hemos podido ganar. Me he concentrado en jugar como sé; se lo dedico a mi familia y a los que me han apoyado". Mendilibar hizo lo propio con Carlos Lázaro, que jugó todo el partido.

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