Valverde resta importancia a la tensión en el entrenamiento.

Ernesto Valverde, entrenador del Villarreal, restó importancia a la tensión que se vivió en el entrenamiento matinal del equipo, en el que los futbolistas Bruno Soriano y Rubén Gracia 'Cani' se enfrentaron en la parte final de la sesión. El encontronazo se produjo después de que el centrocampista Bruno Soriano recriminase a Cani una dura entrada en un lance del juego y que derivó en que los dos jugadores intercambiasen empujones y alguna patada, lo que obligó a ser separados por sus compañeros.

Al final de la sesión se pudo ver a los dos protagonistas del enfrentamiento dándose la mano y hablando de lo sucedido, por lo que Valverde considera que no hay que exagerar ya que "al final ha acabado en risas". Además, se da la circunstancia de que Bruno y Cani mantienen muy buena relación ya que es habitual verles juntos en los desplazamientos del equipo.

Valverde calificó la disputa de "simple encontronazo", además de asegurar que "ha estado incluso gracioso, porque son dos jugadores que se llevan muy bien. Al cabo de dos minutos a ellos mismos les entró la risa". El entrenador del Villarreal descartó que vaya a proponer que se multe a los futbolistas porque "sólo ha sido un lance del partido". "Estas cosas están bien si luego no hay ningún problema", agregó.