El Real Madrid ya conoce de primera mano que no es el primer club en la lista de preferencias de Ricky Rubio. Lo constató este viernes en primera persona un emisario del club blanco, que se reunió en la tarde-noche en Badalona con el entorno más cercano del jugador, en un intento por convencerles de que aceptasen su oferta.
Los allegados del base agradecieron el esfuerzo que el conjunto blanco ha hecho en todo momento por fichar al jugador, pero hicieron ver claramente al emisario blanco que el deseo y la prioridad de Ricky es permanecer en su entorno familiar y de amistades los dos años que le restan antes de irse a la NBA. Ya sea en el Barcelona o en el propio DKV Joventut.
El Madrid, pese a este revés, no retirará la oferta por escrito que presentó hace días por escrito a la Penya, consistente en dos millones y medio de euros con posibilidad de aumentar la cantidad si había una puja.
Los blancos asumen que la única opción de ficharlo es que no fructifique el acuerdo entre el Barça y el Joventut y el jugador reaccione. Es mucho decir.
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