Arjen Robben dio el susto en el único entrenamiento del sexto día de pretemporada del Real Madrid en Irlanda, por una dura entrada de su compatriota Royston Drenthe, que le impidió disputar un partido en reducidas dimensiones montado por Manuel Pellegrini.
La fragilidad de Robben, jugador que la pasada temporada sufrió hasta nueve lesiones de diversa gravedad, provoca siempre máxima atención cada vez que no puede acabar un entrenamiento.
La fragilidad de Robben provoca siempre máxima atención cada vez que no puede acabar un entrenamiento
Todo indica que lo de este domingo quedará en un susto ya que el problema no es muscular sino por el fuerte golpe que recibió en una entrada de Drenthe, en la disputa de un balón dividido.
Robben se quejó desde que recibió el golpe, se quedó tendido en el suelo y tras retirarse a la banda donde fue atendido por uno de los médicos, se marchó al hotel para recibir masaje, dejando su sitio en el equipo a Dani Parejo.
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