Los 5,7 millones de euros que cuesta la cláusula de rescisión del base del DKV Joventut Ricky Rubio hacen, ahora mismo, totalmente inviable su fichaje por el Regal Barcelona, según han confirmado a EFE fuentes del club catalán. El Barça no descartaría hacerse con los servicios del jugador si éste y la Penya llegan a un acuerdo para rebajar la citada cláusula de rescisión pero, mientras esto no se produzca, ni siquiera se plantea su fichaje.
Ricky no aparece inicialmente en la lista de refuerzos con vistas a la próxima campaña, a no ser que éste resuelva su contencioso con el DKV Joventut y se convierta en un jugador asequible.
Rubio, que hace una semana resultó elegido en el puesto número 5 del 'draft' de la NBA por el Minesota Timberwolves -un destino que no es de su agrado- estaría dispuesto a quedarse un par de temporadas en la ACB antes de dar definitivamente el salto a la Liga profesional estadounidense.
Una de las opciones pasa por cumplir su contrato con la 'Penya', que concluye el 30 de junio de 2011, pero si se diera esta posibilidad, el conjunto verdinegro, que mantiene una importante deuda con Hacienda que precisamente ha garantizado con el contrato de Rubio, se quedaría sin embolsar un euro por la marcha de su joven estrella.
Parece lógico que ambas partes acaben por pactar la salida de Ricky, que podría optar por seguir jugando un par de temporadas más en Europa o emigrar ya a la NBA. De momento, el base internacional no ha retirado la demanda que presentó en un juzgado de lo social contra su actual club por entender que su cláusula de rescisión era abusiva, lo que parece bloquear un entente entre ambas partes.
Hasta que el base el conjunto badalonés y la 'Penya' no lleguen a un acuerdo, el prohibitivo precio de Rubio hace inviable cualquier posibilidad de que acabe jugando en el Palau la próxima temporada.
- Spoiler:
marca.com