Acaba de presentar el primer fichaje con más de 50.000 personas. Ha debido de ser impresionante...
Es la vez que he visto más gente en el estadio. He podido contemplar la ilusión que transmite un jugador como Kaká.
En el fondo lo que está haciendo es comprar ilusión...
Creo que no. Soy socio desde pequeño y esto es lo que vi. Cuando vino Di Stéfano al Madrid se podía haber dicho lo mismo. Esta era también la estrategia de Bernabéu, traer a los mejores jugadores. Esta estrategia conquista a los aficionados de todo el mundo.
¿Cómo lleva el cambio de la vida civil a la de presidente?
Yo sigo haciendo mi vida normal. Hoy por ejemplo he estado en Barcelona por mi trabajo.
¿Y cómo le reciben a usted en Barcelona?
Tengo muchos amigos allí.
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