El club parte esta temporada desde el récord absoluto de abonados, 19.250. Sin el tirón que supuso la Copa de la UEFA y con la complicada situación económica que se padece a nivel mundial, en El Sardinero saben que será difícil mantener el listón. Pero lo van a intentar.
No se subirán este verano los precios de los abonos racinguistas. Tampoco, es cierto, se van a reducir pero lo que sí buscan en las oficinas de los Campos Sport son medidas imaginativas que eviten una sangría de socios. Y esa imaginación debe plasmarse, básicamente, en encontrar la manera de dar aún más facilidades de las existentes a la hora de pagar a aquellos que quieran tener un asiento reservado en El Sardinero.
En el club tienen asumido que la campaña de venta de abonos de este año no será tan exitosa como la del pasado verano. Independientemente de la opinión generalmente extendida de que la afluencia a las taquillas depende en gran medida de los fichajes de futbolistas o entrenador (los datos desmienten esta hipótesis), los directivos verdiblancos creen que la crisis económica y la desaparición del gancho europeo serán sus peores enemigos a la hora de vender los abonos.
Los carnets racinguistas no están, ni de lejos, entre los más caros de Primera y en las últimas temporadas los incrementos de precio han sido moderados y bastante bien recibidos por la masa social. La pasada campaña, por ejemplo, la subida estuvo en torno a un 10% y en el abono se incluyó la primera eliminatoria europea, la que luego se cubrió contra el Honka finlandés.
Los precios del pasado verano fueron desde los 195 euros de las preferencias Norte y Sur hasta los 745 de Tribuna Central. Esos serán, de nuevo, los precios de referencia. A partir de ellos se calcularán los diferentes descuentos existentes (antigüedad, peñas, jubilado). No está aún cerrado si alguno de los descuentos puede ser retocado.
Primeros de julio. La idea que manejan en la planta noble del estadio es que los abonos estén ya en las taquillas en los primeros diez días de julio. El mismo día 1, si es posible. De esta manera matarán dos pájaros de un tiro: darán casi dos meses a los socios para retirar su carnet y, además, el dinero comenzará antes a correr por las necesitadas arcas verdiblancas.
De manera inminente se convocará un Consejo de Administración que hará oficial estas decisiones.
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