Repetición de la jugada

La estrategia ha marcado el desarrollo del GP de ItaliaR.

El Gran Premio de Italia nos ha dejado la sensación de que estábamos viendo la repetición de la carrera de hace dos semanas en Le Mans, porque nos hemos encontrado con el mismo panorama que allí, con una carrera de MotoGP que se iniciaba en mojado para luego pasar a ser en seco conforme desaparecía la humedad de la pista. Una vez más ha sido muy importante la estrategia a desarrollar, porque había que saber entrar en el momento oportuno a realizar el cambio de moto, y los pilotos se han encontrado en situaciones muy al límite, casi sin posibilidad de parar a pensar. Estas carreras hasta están resultado muy interesantes por lo imprevisible que resulta, y por este motivo son muy emocionantes.



También muy emocionante ha sido la carrera de 250, en la que ha llovido mucho, más que en ninguna otra, y por eso cualquier mínimo error que se cometiera no se perdonaría, y hemos visto a Bautista, Pasini y Simoncelli rindiendo a un altísimo nivel. Desgraciadamente también hemos visto que Simoncelli ha llegado ya al punto de estar por encima del sentido común de un piloto, porque su maniobra sobre Bautista es del todo discutible, y creo que se tiene que estudiar en profundidad por parte de la Dirección de Carrera.



Otra cuestión importante que conviene que nos paremos a pensar en ella, y que los responsables de la organización también lo hagan, es estudiar la situación que se provoca cuando hay un cambio de tan grande y brusco en la climatología, porque hoy se ha puesto a llover en la misma parrilla de salida y la Dirección de Carrera ha declarado la carrera de mojado, sin darnos más tiempo que cambiar de neumáticos. Habríamos necesitado al menos diez minutos, sólo diez minutos, para modificar los reglajes y preparar la moto para condiciones de agua, porque los pilotos han tenido que salir a pista con gomas de agua y reglajes de seco, con el riesgo que ello conlleva. Con sólo diez minutos de retraso en la salida habríamos tenido tiempo suficiente para hacer ese cambio de reglajes. No es la primera vez que nos pasa, llevamos ya dos carreras así y salir en estas condiciones siempre supone un riesgo para los pilotos. Creo que es una cuestión a revisar y cambiar por parte de la organización.



Nosotros estamos satisfechos con el resultado de hoy. Héctor Barberá ha realizado una carrera más conservadora después de la experiencia del pasado Gran Premio de Francia, cuando se cayó por intentar ir más arriba en condiciones cambiantes. Su primer objetivo aquí era terminar la carrera, y eso le ha hecho ser más conservador, pero ha conseguido amarrar unos valiosos puntos que resultarán muy importantes para el campeonato.



En la categoría de 125 ha habido muchísima emoción, sobre todo en el grupo de cabeza, con esos tres pilotos, Smith, Terol y Simón, peleando por el primer puesto. Creo que Terol ha hecho una gran carrera aquí, una carrera muy inteligente, ha sabido mantenerse delante desde el comienzo, siempre atento a cuanto sucedía en la cabeza, a cualquier movimiento y sin perder el ritmo del primero, y sólo le han faltado dos décimas en el último parcial para poder optar a la victoria. Él mismo ha reconocido que en esa última vuelta cometió un pequeño error y no pudo completar su estrategia de carrera, en la que había pensado llegar a la recta pegado a la rueda de Smith y batirle aprovechando su rebufo. En cualquier caso, su segunda posición es un grandísimo resultado.



Nuevamente el Gran Premio de Italia se ha convertido en una carrera con muchísimo ambiente y mucho público, que han hecho vibrar las gradas y hacer que sintiéramos la carrera con mucha emoción. Los pilotos italianos han dado el máximo, y hemos visto como Rossi, Dovizioso y Capirossi se han vaciado ante los suyos. La pena en esta carrera ha sido la nueva caída de Pedrosa, que de cara al campeonato ve como pierde opciones y se retrasa con respecto a Stoner, Lorenzo y Rossi. Muy bien por Lorenzo, porque sufrir una caída en la vuelta de reconocimiento es algo que te resta confianza, pero él ha sabido afrontar la carrera con inteligencia.



Y también destacar a Bautista, que a pesar de ese tercer puesto, cediendo sólo unos pocos puntos ante Simoncelli, ha visto aumentar su ventaja en la clasificación provisional de 250 sobre Hiroshi Aoyama, que hoy ha quedado más retrasado. Y la carrera de Terol creo que nos permite confiar en que ha recuperado su mejor estado de forma.



Ahora nos encaminamos al Gran Premio de Cataluña, donde nos veremos dentro de diez días. Allí los pilotos españoles volverán a dar la cara, seguro, y nos encontraremos con un gran espectáculo.

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