El escolta Kobe Bryant y el ala-pívot español Pau Gasol llegaron al Toyota Center para reivindicar que el suyo es el mejor equipo de la Conferencia Oeste, al liderar a Los Ángeles Lakers a la victoria de 94-108 sobre los Rockets de Houston en el tercer partido de las semifinales.
La victoria permitió a los Lakers (1-2) recuperar la ventaja de campo después de haber perdido el primer partido de la serie en el Staples Center.
Bryant, en su línea de estrella y jugador decisivo, aportó 33 puntos (11 de 28 y 4-6 triples) para encabezar una lista de cinco jugadores que tuvieron dobles dígitos. Gasol aportó 13 tantos y seis rebotes.
El jugador español volvió a ser decisivo en la defensa que hizo sobre el pívot chino Yao Ming y en las acciones de cuarto periodo cuando los Lakers sentenciaron el marcador para asegurar la victoria.
El alero Lamar Odom volvió a confirmar que es mucho mejor opción como titular que Andrew Bynum y consiguió un doble-doble con 16 puntos y 13 rebotes.
Mientras que el base Jordan Farmar, que salió de titular en el puesto del suspendido Derek Fisher, demostró que debe permanecer en el puesto al convertirse en la sorpresa que dio a los Lakers 12 puntos, con siete asistencias y cinco rebotes.
También el alero, de origen dominicano, Trevor Ariza, consiguió 13 puntos, incluidos tres triples en cuatro intentos.
Mientras que la defensa de los Lakers forzó nada menos que 17 perdidas de balón a los Rockets por tan sólo seis que tuvieron ellos, con 11 robos y sólo dos del equipo de Houston.
El alero Ron Artest, antes de ser expulsado, lideró el ataque de los Rockets con 25 puntos y seis rebotes, mientras que Ming logró un doble-doble de 19 tantos y 14 rebotes.
El alero argentino Luis Scola también aportó un doble-doble de 10 puntos y 12 rebotes en los 27 minutos que estuvo en el campo, pero no iban a ser suficientes para superar a los Lakers, que siempre hicieron mejor defensa, controlaron mejor el balón e hicieron las decisiones correctas a la hora de tirar a canasta.
El partido no pudo comenzar mejor para los Lakers con un parcial de 5-13 que iba a establecer la pauta de lo que iba a ser el resto del encuentro, en el que sólo por tres veces, antes que se fuesen al descanso, los Rockets tuvieron ventaja, la última 43-45.
Luego los Lakers, con Bryant, que en el primer cuarto había conseguido 11 tantos, hizo las últimas canasta para permitir que los Lakers se fuesen al descanso con la ventaja de 48-50.
También volvió a ser el Bryant decisivo en el tercer periodo, cuando los Lakers sentenciaron el partido al conseguir un parcial de 14-24, que les iba abrir el camino del triunfo.
La estrella de los Lakers lo concluyó con un triple magistral, a a pesar de la gran defensa de Artest y ahí se acabó el partido para los Rockets (62-74).
Antes también se había encargado de poner un parcial de 52-60 nada más comenzar el tercer cuarto al conseguir un triple consecutivo junto con el de Ariza.
Porque en el cuarto no sólo iba a continuar la inspiración de Bryant, de Ariza, sino que Gasol surgió con la mejor defensa, anuló por completo a Ming.
Gasol protagonizó también la frustración de los Rockets en los últimos segundos del partido cuando en una penetración tres jugadores del equipo de Houston intentaron bloquearlo y Artest le hizo una falta fragante que le costó la expulsión del partido.
El jugador español anotó desde la línea de personal para simbolizar la merecida victoria de los Lakers, mientras que los Rockets se quedaron no sólo con la derrota, sino también con la interrogante de que va a pasar con los Artes para el cuarto partido de la serie, a disputarse el domingo, y la lesión de Ming.
Todo un panorama desolador para los Rockets que fueron un equipo completamente diferente al de los dos primeros partidos disputados en el Staples Center de Los Ángeles como lo demostraron las estadísticas.
Los Lakers tuvieron un 43,9 por ciento de acierto en los tiros de campo y el 55,0 (11-20) de triples, comparados al 41,7 y 31,6 (6-19), respectivamente, de los Rockets.
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