El cántabro se reencuentra con el triunfo en la Vuelta a Romandía.
Óscar Freire ha vuelto a sonreír. El ciclista cántabro del Rabobank ganó ayer al sprint la segunda etapa del Tour de Romandía, disputada sobre un recorrido de 161,5 kilómetros, con salida y llegada en la localidad de La Chaux-de-Fonds. Freire se aprovechó de la reagrupación del grupo a falta de cuatro kilómetros y se impuso con facilidad en el sprint final por delante del checo del Team Columbia-High Road Frantisek Rabon, ganador del prólogo, y del kazako del Astana Assan Bazayev. De esta forma el cántabro consigue su primera victoria de la temporada y la número 57 de su carrera.
La escapada del día tuvo como protagonistas a los franceses Mathieu Sprick y Florent Brard. Su testigo fue recogido por los dos líderes del Silence-Lotto, Cadel Evans y Phillip Gilbert, que saltaron a dúo para abrir diferencias durante la última subida, situada a una decena de kilómetros de la meta. El checo Roman Kreuziger (Liquigas) y el español Alejandro Valverde (Caisse d'Epargne) trataron de dar caza a la pareja de belga y australiano, pero todos fueron absorbidos. Con el 'paquete' reunido, el Rabobank trabajó para Freire, que buscó y logró el triunfo en el sprint masivo, que le permite inaugurar su palmarés de victorias en lo que va de año.
El liderato, tras esta segunda jornada, continúa en manos del suizo del Astana Gregory Rast.
Fuente: El Diario Montañes