Felipe Reyes, pívot y capitán del Real Madrid, es seria duda para poder jugar el próximo sábado contra el Barcelona debido a una cervicalgia, con contractura muscular asociada, que ya le impidió jugar el último partido de Liga en Fuenlabrada.
El pívot madridista lleva más de una semana sin poder entrenarse con sus compañeros y la ausencia, a día de hoy, de las sesiones de preparación hacen muy inviable que el sábado pueda estar recuperado y a las órdenes de Joan Plaza.
La última evaluación médica del jugador no ha hecho sino confirmar su estado y la necesidad de esperar una mejoría en su evolución.
El partido entre Real Madrid y Barcelona es importante porque los dos equipos pugnan por la segunda posición de la clasificación, que ahora ostenta el club azulgrana con dos victorias de ventaja. Caso de ganar el Real Madrid la diferencia se reduciría a una sola victoria con tres jornadas por disputar para ambos conjuntos.
Una derrota del equipo madridista, por contra, podría propiciar la pérdida de la tercera plaza, a la que también aspira el Unicaja.
- Spoiler:
AS