Dakar: Sainz aguanta a un feroz Al Attiyah

Se esforzó ayer hasta más allá del límite Nasser Al Attiyah para rebajar la diferencia con Carlos Sainz en la que, probablemente, sea la etapa más importante de la actual edición del Dakar. Y consiguió más de cuatro minutos de ventaja sobre el madrileño que, pese a todo, sigue liderando la general con más de once sobre el príncipe qatarí.

Nasser está ante la oportunidad de su vida de convertirse en un piloto que entre en la historia y va a luchar por aprovecharla. Con el último ganador, Giniel de Villiers hundido en la clasificación a más de cuatro horas, y el hombre que más veces ha ganado, Stephane Peterhansel, a más de dos, con el mejor coche en sus manos y la experiencia necesaria para poder ganar, sabe que su único obstáculo es Sainz. No es poco. El español también quiere ganar y llega a la etapa de descanso como líder, con mejor ritmo que nunca y, pese a no haber ganado aún ninguna etapa, con la firme intención de convertirse en el primero de nuestros pilotos en ganar el Dakar en coches.

Ayer volvieron a rodar rápido, pero manteniendo la mecánica entre Iquique y Antofagasta en una especial que iba a estar marcada por el paso de un salar, una enorme formación de sal seca en mitad del desierto, a una velocidad máxima de diez por hora, pero finalmente ese tramo se quitó del recorrido por las quejas de las asociaciones locales de protección del medio ambiente.

Segundo ayer fue un Peterhansel que está dando muestras de su calidad con el BMW y demostrando que, de no ser por la avería del día de Fiambalá, estaría luchando por ganar su décimo Dakar. Hoy, descanso.

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